Préstamos para reforma del hogar o Préstamo Reforma, Crédito Reforma

Tarde o temprano, los propietarios de una vivienda nos vemos obligados a hacer una serie de reformas en ella. Por deterioro y envejecimiento de la vivienda o por simple deseo de modernización, la lista de elementos a mejorar durante la vida de nuestra vivienda es amplia: desde instalar un sistema de calefacción, a renovar la cocina o los baños, sustituir las baldosas del suelo, rehacer la distribución ampliando habitaciones, estucar y repintar las paredes, etc.

Pero estas reformas suponen una cantidad de dinero alta, que pocas familias dispondrán en efectivo para afrontar los pagos. Se suele recurrir entonces a solicitar un préstamo bancario.

Puesto que las reformas del hogar son un potencial mercado a financiar, las entidades crediticias se han afanado en presentarnos unos créditos con denominaciones parecidas (Crédito Reforma, Préstamo Reformas, Préstamo Reforma Hogar, etc.) con el fin de proporcionarnos la financiación que necesitamos para realizar las reformas.

Estos créditos se enclavan dentro del espectro de los créditos personales al consumo, y suelen ser muy similares en cuanto a cantidades máximas, plazo de devolución e interés, aunque algunas entidades ofrecen créditos para la reforma ligeramente más baratos que los créditos personales ordinarios.

Las cantidades a obtener por un crédito reforma

Las cantidades a obtener por un crédito reforma pueden variar entre 300 y 60.000 €, con plazos de devolución entre 3 y 10 años, según los importes solicitados. Y los intereses rondan el 6 ó 7% TAE, aunque con dos consideraciones: primero, que el interés es más bajo cuanto más fidelización exista con la entidad (nóminas, seguros, cuentas, hipoteca, etc.), y en segundo lugar, hemos de tener en cuenta que muchos de estos préstamos no tienen un interés fijo durante toda su duración, sino que hay algunos que tienen un interés más bajo al principio para aumentar a partir del segundo o tercer año, y otros tienen un plazo de interés fijo al principio y variable después. Por tanto, estudiaremos detenidamente las condiciones y las compararemos con otros préstamos. Siempre recomendamos la saludable costumbre de comparar primero detenidamente y decidir después. Además, como en el caso de otros créditos, hemos de tener en cuenta a la hora de decidir, que existen comisiones que pueden encarecer el producto, como comisión de apertura y/o cancelación, el seguro de amortización en caso de fallecimiento y otros gastos como el Notario (0,3% del montante del préstamo) si el préstamo excede unas ciertas cantidades y exige su registro notarial.

Obtener dinero para reformas del hogar del importe de la hipoteca

También hay que resaltar que algunas entidades ofrecen la posibilidad de obtener dinero del importe de la hipoteca que ya se ha amortizado. Esta disposición de capital suele tener un interés más bajo que los préstamos personales, a cambio de que tiene la garantía hipotecaria como base. Aunque pueda parecer un préstamo personal, no es sino la ampliación del capital de la hipoteca. Es una de las opciones más baratas para reformar la casa, pero hay que disponer del suficiente capital amortizado para poder disponer de él.

Créditos express

Si el importe de las reformas no es excesivo, podemos financiarlas a través de otros créditos, como los créditos express. Como ventaja, obtendremos el dinero más rápidamente, pero como principal desventaja, los costes son mucho mayores (intereses entre el 10 y el 25%).

Tarjeta de crédito

También podemos recurrir a nuestra tarjeta de crédito convencional, cuyos intereses rondan el 12-15% anual y la disponibilidad de su capital es inmediata. Pero tratándose las reformas de algo no urgente, es decir, que no surge la necesidad de reformar de la noche a la mañana, estos créditos express o créditos de tarjeta no son un medio muy atractivo para pagar unas reformas. Podemos perder unos días en comparar, negociar, solicitar y obtener el préstamo para las reformas más apropiado para nuestras necesidades y nuestro bolsillo.